domingo, 1 de abril de 2007

Mario,...Te Recuerdo,...Como Historia Ya Pasada,...




Tu  amor me llega como una avalancha De besos, suspiros, deseos y miradas Compartiendo el aire de la tarde Y la brisa  fría de cada madrugada. Tu cariño  me llega a destiempo Como el sol sobre la leña quemada Cuando ya fallecieron los Jacinto Y yo esperaba la luz de la mañana. Tus sueños me llegan a deshora Envueltos en muchas esperanzas Mi boca  se esconde en un arca Que zarpó hace mucho, a aguas mas calladas... Tus brazos cual  bandidos aparecen Robándome el silencio, el corazón y el alma Y me enrollan en olas  desbocadas Que alteran mi vida y me desarman. Es tarde…ya se aburren tus brazos por la espera. Se escaparon siguiendo otras mareas Y cayeron al mar, tristes e infecundos Como los encuentros amorosos  del hombre y la sirena. EL FINAL ¡Calla ¡.ya lo leí en tu cara. Aparecieron las molestias y Se desataron mis lágrimas, Callaron los arroyos y se escuchan los sollozos, Qué escapan con angustia por los barrotes de la ventana Cual  cataratas contenidas, por compuertas de cizaña Nada digas, nada expliques, nada agregues Para palabras, ya es tarde. Ya dijimos todo lo que queríamos y pensábamos. Se apagaron las voces, se acabaron las miradas. Se ahogaron los besos, se diluyeron mis risas. Sé transformaron  los sueños  en caricias despreciadas…Nada digas nada, que tu voz me rompe el alma Tus manos me producen llamaradas Tu boca que era mía ya está lejos Te recuerdo como  historia ya pasada Como tren que se lleva mis recuerdos Como la última página de un libro deshojado. Nada digas, ¡por favor no digas nada!



SOFÍA